sábado, 21 de abril de 2012

Buscar los frutos de la Resurrección

En la reunión del viernes buscamos los frutos de la Resurrección para comprometernos a sembrarlos.

Buscar los frutos de la Resurrección.
Si no busco el poder
ningún poderoso podrá hacerme daño.

Si no ambiciono riquezas
jamás me sentiré amenazado
por la miseria.

Si no corro tras los honores
convertiré toda la humillación en humildad.

Si no me comparo con nadie
seré feliz con lo bueno
que hay en mí mismo.

Si no me dejo invadir por la prisa
encontraré tiempo para todo lo necesario.

Si no soy esclavo de la eficacia
daré el fruto que los demás esperan de mí.

Si no me enredo en la competitividad
entraré en comunión
con lo bueno que hay en todo.

Si vivo a fondo el momento presente
seré dueño absoluto
del pasado y del futuro.

Si acepto el fracaso en mi vida
habré librado mi vida de toda frustración.

Si vivo para el AMOR
el AMOR estará siempre vivo en mí.

Además vimos el PowerPoint de la lectura de este domingo, que nos plantea pregruntas a las que debemos dar respuestas sinceras y actuar en consecuencia.

jueves, 19 de abril de 2012

A Don Pedro Monzón

Muchas son las personas que tuvimos la suerte de conocerle y seguramente todas recordaremos por siempre a Don Pedro, nuestro compañero de reflexiones que sabía llegar a nuestros pequeños corazones irradiando alegría y juventud.
¿Qué como lo recordaremos? Cada cual tendrá su momento preferido: Aquel meditando, aquel otro saludando afable, quizás cuando se disfrazaba de moro o de mago para ambientar un grupo de trabajo juvenil en las noches frías de Teror, en las misas de jóvenes,...
Para él que siempre tenía un rato para escuchar, para aquella bellísima persona que no notabas que estaba a tu lado pero ¡allí estaba!, para tí, Don Pedro, nuestro amigo, sacerdote, compañero, maestro, animador,... te mandamos mil besos que te sirvan de colchón para tu merecido descanso.