Nos acompaña San Antonio Mª Claret rezando la oración:
"Señor y Padre mío:
Que te conozca y te haga conocer;
Que te ame y te haga amar;
Que te sirva y te haga servir;
Que te alabe y te haga alabar,
Por todas las criaturas."
Que te conozca y te haga conocer;
Que te ame y te haga amar;
Que te sirva y te haga servir;
Que te alabe y te haga alabar,
Por todas las criaturas."
En esta ocasión los misioneros nos explican la práctica de las Visitas Misioneras, ¿cómo se hace?
¿Quienes pueden hacer la visita misionera?
- Las personas que están en los distintos grupos de la Parroquia.
- Las personas que han participado en los Grupos de Misión.
- Otras conocidas, capaces de hacer esta tarea e invitar a ello.
- El párroco y religiosos/as del lugar.
Actitudes de los que hacen la Visitación.
- Saber que vamos enviados por el Señor. La actitud de la gente es hacia el Señor, no hacia nosotros. Hay que avisar por todos los medios de la misión y aclarar cómo es para evitar malos entendidos y picarescas.
- Gratuidad, servicio y entrega. Lo que se nos ha dado gratis, gratis lo ofrecemos. No debemos esperar nada a cambio, ni las gracias. Todo lo ofrecido es de Dios, nosotros somos meros portadores.
- Sencillez y alegría.
- Amabilidad, respeto y comprensión.
- Aceptando las posibles dificultades.
- Sin criticar a nadie, sea cual sea su acogida.
Lo que se pretende en esta Visita Misionera es, por parte del visitador:
- Saludar en nombre de la Parroquia. Esto acerca la Parroquia al pueblo.
- Informar sobre la Misión Parroquial. Para ello se entregarán trípticos, personalmente. El encuentro personal compromete mucho más.
- Invitar a todos a participar en la Misión Parroquial.
- Facilitar algunos datos de la familia.
- Facilitar el nombre de alguna persona enferma.
- Rezar por la Misión Parroquial con la estampa.
- Ofrecer su casa para las 5 reuniones de Asamblea Familiar (reuniones de vecinos, de no más de 10 personas).
- Comprometerse para ser monitor/a de alguna de las Asambleas Familiares.
Cada pareja (preferiblemente conocidos y bien avenidos, de distinto sexo o mujeres, y de ser muy joven acompañado por un mayor) deberán:
+ Ponerse de acuerdo en el día y la hora.
+ Orar antes de salir.
+ Revisar el material necesario (una por casa a visitar):
- Estampas de la oración por la Misión.
- Hojas informativas sobre la Misión.
- Fichas de datos de la casa.
+ Llamar y saludar.
+ Identificarse.
+ Explicar la doble finalidad de la visita:
- Informando de las principales acciones de la Misión.
- Invitando a todos a participar en la Misión.
Al finalizar la tarea:
+ Discreción y reserva. Es importante garantizar la confidencialidad de los datos obtenidos (escritos, verbales o gestuales).
+ Entregar el trabajo realizado en el lugar convenido (al responsable del sector).
+ Dar gracias a Dios por lo experimentado.
En la Visita Misionera hay dos protagonistas con sus reacciones:
VISITADO/A: Sorpresa, Indiferencia o Alegría.
VISITADOR/A. Temores y miedos:
- Confusión con un vendedor.
- Confusión con un Testigo de Jehova.
- A lo que me puedan preguntar.
- Ser el hazmerreír.
- Vergüenza y "el que dirán"... Pero ¿y Dios que dirá de nosotros si por esta razón no participamos?
- Críticas o comentarios de la gente.
¿Seré capaz?
VISITADOR/A. Esperanzas e ilusiones:- Es una experiencia de fe.
- Me siento testigo.
- Me acerco más a la realidad.
- Sabemos que ha funcionado.
- Nos apoyamos al ir en parejas.
Para Dios no hay nada imposible.
JESUCRISTO vive entre nosotros.
¿Cómo van a saber de Jesús... si nadie habla con amor.
Tú le amas... ¡anúncialo!
Finalizamos el cursillo, con mucha pena pero con muchas ganas de salir por las calles a comenzar nuestro trabajo, con unos vídeos que ejemplifican las distintas situaciones con las que nos vamos a enfrentar.
Gracias, desde este espacio, por TODO a los misioneros Juan Antonio y Luis Antonio del Equipo Claretiano de Evangelización Misionera (ECEM).
¡Hasta pronto!